¿Qué es la Rinoseptoplastia?
El examen para indicar una rinoseptoplastia es el clínico, utilizando una endoscopía endonasal. El otorrino, a través de una fibra óptica, observa las deformidades de la nariz. Los otros exámenes son complementarios, para ver qué consecuencias podría llegar a tener la operación de la nariz. Estos son:
- Escáner de senos paranasales, que se utiliza para investigar cuál es la posición del tabique nasal, el tamaño de los cornetes y evaluar cual es la consecuencia que tiene la obstrucción en los senos paranasales, ya que pueden producirse sinusitis secundarias.
- La rinomanometría, que mide la permeabilidad nasal o presión de inspiración y espiración en la nariz, para saber cuánto esfuerzo se requiere para hacer ingresar aire hacia la nariz
Es muy importante que ambos procedimientos siempre se realicen en manos de un cirujano especialista en nariz para tener buenos resultados y minimizar los riesgos.
La Rinoseptoplastia es una cirugía mediante la cual se modifica la estructura interna de la nariz logrando cambios en el dorso, la punta, las fosas nasales, su tamaño o su ancho. También mejora problemas funcionales y sus resultados son permanentes. La rinomodelación es un procedimiento no quirúrgico que permite hacer pequeños cambios estéticos solo en el dorso de la nariz o la punta mediante rellenos inyectados. Los resultados pueden durar aproximadamente 3 meses. Es muy importante que ambos procedimientos siempre se realicen en manos de un cirujano especialista en nariz para tener buenos resultados y minimizar los riesgos.
Si quieres tener cambios notorios y duraderos, la Rinoseptoplastia, es sin duda, un procedimiento más especializado, seguro y con mejores resultados. Si te interesa una Rinoseptoplastia te recomendamos No hacer una rinomodelación antes, ya que esto puede generar alteraciones en el resultado final de la Rinoseptoplastia.
La rinoseptoplastía no duele, esta cirugía es realizada con una anestesiólogo que se encarga de darle confort y la menor molestia al paciente, por ende la cirugía no es dolorosa. Al volver a su casa, quedan con tapones nasales durante tres días, placas nasales durante quince días que permite estabilizar el tabique, y una férula de yeso que se cambia a la semana y luego de quince días se retira. Posteriormente, se deben realizar masajes -que se hacen en forma periódica- y curaciones. El resultado final es a los 6 meses de la cirugía.